La primera jornada del festival internacional cerró con Drake por primera vez en el país, la hipnosis de Rosalía y Chano y la reunión de Tan Bionica.
Contra todo pronóstico, el primer día de Lollapalooza Argentina no llovió. Sol radiante, 32 grados, transpiración, gorras y botellas de agua. A las 12 del mediodía, las puertas abrieron y dejaron pasar a los valientes que desafiarían el calor del mediodía con música. La variedad de propuestas de los cuatro escenarios se presentó tanto en género como en nacionalidades.
Luego de calentar motores con Nani y An Espil en los Escenarios Flow y Samsung, a las 14:30 llegó Silvestre y la Naranja al Flow con canciones como "Sos todo lo que está bien", "Amores callejeros" y "Tu veneno". Paralelamente, en el escenario Alternative, Paz Carrara también tuvo su debut en Lollapalooza Argentina. Fue la segunda del Escenario Alternative, antecedida por el bonaerense Guillermo Beresñak. Con un conjunto de pantalón y blazer floreados, Paz dio vida a sus canciones e invitó a Santi Celli a cantar "Aunque no te lo diga" y "Ancla" a dúo.
Cerca de las 15:15, con el calor en ascenso, el Samsung abrió sus puertas a Suki Waterhouse. El convocante show de la inglesa fue signo de que el predio comenzaba a llenarse a pesar de los 32°. En el escenario, antes adiestrado por Plastilina y The Change, sonó su último lanzamiento, "To love" y algunas de sus canciones más reconocidas, como la última del show, "Good Looking". Mientras tanto, en el escenario Perry's -por el que habían pasado Panther y Flaca, Oscu acompañó el calor con "No dijeron nada" y "Malibú".
Dante Spinetta llegó con su Mesa Dulce, último trabajo lanzado en 2022. Vestido de azul y acompañado de una banda vestida de un rosa contrastante, el argentino interpretó clásicos de su repertorio solista como "Soltar" y su reciente hit, "El lado oscuro del corazón", además de rememorar a Illya Kuryaki and the Valderramas con "Coolo". Incluso, tuvo un momento en el escenario con su hija, Vida, que debutó en el escenario junto a su padre. "Acuérdense de ella", soltó para concluir el momento emotivo. Avanzado el show, invitó a Trueno a corear "Tengo tanto amor que no tengo miedo", de su reciente colaboración, "Sudaka".
En el alternative, fue el turno del español Guitarricadelafuente. En su primera visita al país, Alvarico paseó al público por canciones como "Agua y mezcal" y "Guantanamera", que lo hizo emocionar hasta las lágrimas. Vestido de rojo, ofreció la cuota alternativa a los escenarios principales y concluyó en un formato poco usual en el festival: a guitarra y voz.
Villano Antillano se adueñó del Perry's cuando faltaban 15 minutos para las 17. La rapera puertorriqueña lució un look y el cabello principalmente celeste para interpretar temas como "Cáscara de coco" y la esperada "Bizarrap Music Sessions #51".
Desde Noruega, Aurora aterrizó en el Samsung con una de las puestas más completas del show. De amarillo, con una banda completamente de blanco y bailarines vestidos en composé de tonos claros, simpatizó a todo el público con su performance y comentarios. "Los amo mucho a todos, están lindísimos", arrojó, y dio lugar al humor: "Estamos transpirando mucho", soltó más de una vez.
En la otra punta del predio, el Perry's continuó dando pan al público hambriento de danza. Lo hizo con Oscu, Villano Antillano y a las 17:15 con Young Miko. También puertorriqueña, cantó, rapeó y saltó acompañada de un DJ. En simultáneo, The Rose dio la primera pisada de Corea del Sur en Lollapalooza Argentina. El grupo de K-pop, rock e indie, originaria de Seul -tres de sus miembros- y un estadounidense.
A las 18, Tove Lo apareció en el Flow con un repertorio óptimo para el pogo. Con un look veraniego, poca ropa, un tejido brillante y una performence atrevida -en la que incluyó un topless por unos segundos-, se llevó todas las miradas. En su regreso al país, la sueca de 35 años y su potente voz entonaron clásicos como "Habits (stay high)" y "No One Dies From Love" y dio uno de los números más altos del festival. Cambios de look, un abrazo a la bandera de Argentina, comentarios en español e instantes de twerking coronaron uno de los shows más épicos de la tarde.
Puerto Rico continuó dando el presente en el Perry's con el arribo de Álvaro Díaz. Lo sucedió Danny Ocean, quien a las 20 comenzó con "Dembow" y siguió con clásicos como "Me rehúso" y "Fuera del mercado". En su tercera visita al país, el venezolano volvió a mostrar su amor por Argentina al interpretar "Muchachos", el himno del mundial Qatar 2023. Otra de las perlitas llegó cuando invitó a Elena Rose a interpretar "Las estrellas / si tu me love me".
Con un comienzo enérgico al compás de "Hood Hood", Trueno copó el Samsung, acompañado de Pedro Peligro -su papá- y KMI420. Con referencias a "Y lo que quiero es que pises sin el suelo" de Catupecu Machu y al himno de Jackson Five, "ABC", acompañó la caída del sol y el calor. También repasó clásicos como "Mamichula", "Salimos de noche" y "Argentina", y lució su freestyle. Otro crossover del show se dio cuando emuló la melodía de "Highway to hell" de ACDC en "Sangría", su colaboración junto a WOS. La temperatura del escenario se incrememtó con el avance del show y el artista de 20 años fue dejando su capa para lucir su musculosa negra estampada con las Islas Malvinas. "En este disco mandé a la mierda el individualismo. Lo escribí por todos. Hoy somos todos hijos de una misma madre", arrojó. Inmediatamente, comenzó a sonar "Tierra Zanta".
Marilina Bertoldi llegó al Alternative cerca de las 20. Vestida de jean, top rosa y anteojos de corazón, comenzó a rockear acompañada de una banda conformada principalmente por mujeres. La argentina revivió temas de Prender un fuego (2018) -Gardel de Oro- como "La casa de A" y "Fumar de día", reversionada. También, dio lugar a sencillos de su nuevo disco como "Es poderoso" y "Amuleto".
En el Flow, Chano aterrizó con clásicos como "Amor y roma", "Carnavalintro" y "Obsesionario en La mayor". "Hoy se viene algo histórico en el escenario", soltó luego de quinto tema. Y así sucedió. En medio del show, anunció el regreso de Tan Biónica por una "última noche mágica" en un gran estadio de la ciudad de Buenos Aires. Concluyó el show con "Melodía de Dios" y un abrazo junto al resto de la banda -Bambi, Sebastián y Diego- al compás de "All you need is love".
En su segunda visita al país en menos de un año, Rosalía comenzó a cerrar la primera jornada del festival en el Samsung. Luciendo un vestido cuadrillé con los colores de Argentina -el que cosió un asistente en medio del show porque se había roto-, repasó éxitos como "Despechá", "Linda" -colaboración con Tokischa- y "LLYLM". También se dio el lujo de soltar el piano e interpretar "Hentai" acapella, por dificultades técnicas con el pedal de sustain. Descendió del escenario y compartió el micrófono con el público, que coreó "La noche de anoche" con ella, ante la falta de Bad Bunny. Aunque los fans son gran parte de su show, ya que la motomami los filma, dialoga con sus carteles, los invita a cantar. Para cerrar, eligió "CUUUUuuuuuute" y concluyó cantando "Que aquí el mejor artista es Dios".
En la otra punta del Hipódromo, el Perry’s continuó dando baile. Esta vez, con John Summit como anfitrión. El DJ chicagüense se encargó de musicalizar la cumbre de la noche, a las 21. Para continuar en alza, llegó Alison Wonderland. La australiana cerró el escenario con sus bandejas y una escenografía exquisita. Sumada a las voces y las palmas, comandó un broche de oro electrizante.
La puesta más distinta del festival hasta el momento la aportó Drake. No solo por tratarse de su debut, sino por el poder del minimalismo. Apoyado en visuales blancas, negras y rojas, y columnas de fuego, se paseó por todo su repertorio con un show unipersonal. “Hotline Bling”, “Hold on we’re going home”, “God’s plan”, “One dance”, fueron algunas de las canciones que conformaron una suerte de medley. También incluyó “Mia” -su colaboración con Bad Bunny– en la que cantó en español, con simpatía, para sustituir al puertorriqueño. Otra perlita: el rapero también entonó el himno de la scaloneta, “Muchachos”, con la copa del mundo en las visuales. A pesar de finalizar treinta minutos antes de lo pautado, los clásicos desataron el coreo y la atención de todo el predio, que puso todo sus ojos en el canadiense para concluir la primera jornada.
Mientras tanto, el Alternative cerraba sus puertas con Cigarettes After Sex. Los texanos recordaron su historia en canciones como “Nothing’s gonna hurt you baby” y “Sweet”, con una puesta exclusivamente en blanco y negro y abundante humo. “Los amamos un montón. Gracias por compartir esta noche con nosotros”, soltaron, emocionados. Se despidieron del escenario al son de “Apocalypse”.
Con un remix original de “I’m Good (Blue)” de David Guetta y Bebe Rexha, Armin Van Buren inauguró su momento en la noche desde el Samsung. El último momento de la noche. El DJ holandés coronó el primer día de Lollapalooza con un show enérgico y robándose las miradas de todo el público presente.
La primera jornada finalizó “con altura” y todo parece indicar que así continuará…