El cantante puertorriqueño presentó su nuevo álbum de estudio y lo definió como el resultado de un largo proceso artístico y personal. Sin embargo, también refleja lo que un artista debe afrontar para mantenerse en la cima.
Tranquilo, vestido con su buzo Young Kingz y sentado en su estudio de Puerto Rico -lugar que considera su casa-, Myke Towers nos recibió en videollamada para hablar de su regreso de la mano de un nuevo álbum, La Vida Es Una, un día antes de su lanzamiento. El joven puertorriqueño, quien todavía se considera a sí mismo como un “simple rapero”, trabajó a lo largo de estos últimos años en un disco con el que busca subir al siguiente nivel, y por lo que contó, parece que lo logró.
Al momento de hablar sobre sus sensaciones en este 2023, a Myke se le iluminó la cara, parece que todo lo que tenga que ver con el número mágico para él es digno de alegría. Desde el principio de su carrera, el “23” tomó un papel protagónico, por lo que no podía dejar pasar la oportunidad de hacer de este año, uno de los mejores de su carrera. “Este año es para ejecutar todo lo que tenía en mente musicalmente hablando. Me tomé un tiempo para crear a mi gusto y ahora siento que estamos ready para darle a la gente lo que se merece. Es tiempo de servir”, afirmó con decisión.
Gracias a que jugadores como Michael Jordan o Lebron James en basketball o David Beckham en fútbol - entre muchas otras figuras -, este número no es simplemente uno más, sino que trae consigo un significado de poder y liderazgo que trasciende disciplinas. Ante la historia de por qué eligió este número como pilar, Towers recuerda: “Es un número que es inspiración de ganador. Hay una población muy grande que se siente identificada con personas que han usado este número y yo me incluyo ahí. No soy atleta ni nada de eso pero si el estudio fuera un gimnasio, entreno como el mejor”.
Esa capacidad de mantener firme el camino del trabajo y la determinación para buscar un siguiente nivel en su carrera, tiene que lidiar constantemente con la presión del público y los tiempos de la industria, algo que no es fácil para nadie. Esta cuestión es la única frente a la que Myke siente algo de incertidumbre, como si no fuese algo que pudiera controlar aunque lleve años trabajando en ello. “Hay veces en las que uno es un villano por querer ser héroe en otro lado. Intento buscar un balance entre mi carrera y ver a mi familia y amigos, por ejemplo. Es mi única preocupación hoy en día”, expresó con un ligero tono de preocupación.
Sin embargo, la música es algo que lo ayuda a sobreponerse a cualquiera de estas situaciones, ya que lo acompaña las 24hs del día, los siete días de la semana y los 365 días del año.
Decís que no sos atleta, pero el ejercicio físico y mental que requiere ser artista es enorme, ¿no?
Totalmente, además tenemos que lidiar con la presión de los fanáticos que te piden música y siempre quieren movimiento. Tenemos que buscar el punto medio para que la gente se sienta conforme y nosotros también estar contentos con lo que hacemos. Es fundamental.
¿Qué le dirías a un artista joven que empieza a sufrir esa presión y no sabe cómo manejarla?
Al principio me gusta decir que es un sentimiento hermoso y que nunca más lo vas a sentir. Uno siente la presencia de la presión porque el público te exige un cierto nivel, y eso pasa porque tú le diste algo que hizo que ellos piensen que ese nivel que uno tiene está a cierta altura. Me pasó con “Si Se Da”, donde a partir de ahí todo el mundo pretendía que todas mis canciones fueran con esa, y lo que a veces no entienden es que ese tema lo hice como hago todos los demás, pero no siempre salen igual.
Todo ese proceso de crecimiento y superación personal se ve reflejado en La Vida Es Una, álbum cuyo título refleja el estado actual de Myke, dejándose llevar por lo que la vida le trae pero también siendo consciente de que hay que aprovechar cada momento. Este trabajo está compuesto por 23 canciones - no podía ser de otra forma -, entre las que se encuentran “Cenizas Quedan”; “Ulala”, junto a Daddy Yankee; “Conocerte”, con Ozuna; “Celos”, en compañía de J Balvin o “”Don & Tego”; un homenaje a la vieja escuela en colaboración con Arcángel.
El artista de hoy 29 años se caracterizó no solo por su nivel de interpretación en solitario, sino que también formó parte de algunas de las colaboraciones más exitosas del género a lo largo de su trayectoria. “La Curiosidad”, junto a Jay Wheeler; “Pareja del Año”, con Sebastián Yatra o el remix de la mencionada “Si Se Da” son solo algunos de estos casos. Más recientemente formó equipo con Tiago PZK en “Traductor”, canción que llegó hasta el quinto puesto del Billboard Argentina Hot 100 y que recuerda de la siguiente manera: “Hay que darle el mérito completo a Tiago. Es de esos artistas que ya vienen con un nuevo movimiento y una nueva atmósfera a la música”
Pero a pesar de que este álbum también cuenta con colaboraciones de gran nivel, Myke quiso dejar claro que se encuentra en un momento donde prefiere lanzar hits en solitario: “En este trabajo siento que no quería meter mucha colaboración porque personalmente colaboré con muchos artistas en este último tiempo. Era momento de presentar música de mi parte, no por nada malo, sino para volver a crear un nuevo lazo con el público”.
Muchos dirían que 23 canciones en un álbum nuevo es un trabajo admirable.
En estas 23 canciones quise buscar que la gente que cantaba Like Myke cante también La Vida Es Una, porque es el resultado de un largo desarrollo artístico y personal. Lo más difícil de este álbum fue elegir cuáles serían las canciones que quedarían elegidas en el primer listado, porque cuando voy al estudio grabo, grabo y sigo grabando…
¿Por qué “Aguardiente” fue la primera canción que publicaste con videoclip en YouTube?
No sé si te das cuenta que muchos artistas lanzan el disco o el primer videoclip con la canción más fuerte que tienen. En mi caso fui poco a poco porque sé que cuando la gente descubra el álbum van a haber muchas cosas que los sorprendan. Por eso elegí “Aguardiente” como el primer tema con videoclip.
Y durante el proceso de creación, ¿hubo algo que te haya sorprendido a vos?
Lo que más me sorprendió es que hice cosas que ni yo mismo pensé que podía hacer. Logré presentar un proyecto nuevo sin dejar de lado mi esencia, para que el público lo acepte y vea que un simple rapero, que fui cuando empecé en la música, puede hacer música que le guste a todo el mundo.
¿Qué queda en vos de ese “simple rapero” que empezó en esta industria?
No se va a ir nunca. Es una categoría que siempre hay que cubrir. Hoy en día estoy explorando en muchos géneros y buscando lo mejor, pero cada vez que la gente quiera escuchar el Myke Towers original voy a volver. Por ahora estoy haciendo música que es lo que me apasiona, y por suerte pudiendo colaborar con las viejas y nuevas generaciones. Hay muchas cosas que me faltan por hacer en la música pero nunca se irá la esencia del rapero que soy.
¿Seguís teniendo la pasión de rapear sobre cualquier base que escuches?
Te doy un ejemplo… Hace días salió el disco nuevo de Eladio Carrión y siento que ya se convirtió en una pieza de colección. Ese tipo de música hace falta en el mundo, y darme la oportunidad de formar parte de él haciendo algo que de verdad me gusta es algo invaluable. Mi fuerte es el rap, y siempre voy a intentar ir para ese lado, porque es lo que me gusta y disfruto.
¿Qué nos podés comentar sobre las colaboraciones en este nuevo álbum?
Te soy sincero, a nivel de álbum siento que las colaboraciones son muy difíciles de elegir. Hay muchas que quedaron fuera, pero si hacemos una versión deluxe, prometo que las incluiré. En este trabajo siento que no quería meter mucha colaboración porque personalmente colaboré con muchos artistas en este último tiempo. Era momento de presentar música de mi parte, no por nada malo, sino para volver a crear un nuevo lazo con el público.
¿Cuánto tiempo tardaste en encontrar este nuevo estilo y concretarlo?
Lo que tuvo este trabajo es que no fue creado con la presión de tener que sacar las canciones en un cierto tiempo. Hay temas que los tenía de antes, otras que fueron en el momento y algunas que las creé hace algunas semanas atrás. La creación es como comprar ropa, si la compras en una temporada y la usas en un tiempo, quizás te queda fuera. Esto es igual, hay que ir poco a poco, no lo tiro todo en el mismo momento porque hasta se llegan a parecer entre sí. Me gusta que tengan su diferencia y se sienta que fueron grabadas en muchas épocas diferentes.
Una de esas colaboraciones fue “Traductor”, con Tiago, que todavía sigue presente en nuestro Hot 100
Hay que darle el mérito completo a Tiago. Es de esos artistas que ya vienen con un nuevo movimiento y una nueva atmósfera a la música. Yo me metí en su mundo porque lo respeto al 100%, al igual que hice con Camilo, Quevedo, Sebastián Yatra y muchos otros. Los que salen ganando ahí son los fanáticos.