Un nuevo género está resonando no solo en fiestas, afters, y plataformas como TikTok y YouTube.
Un nuevo género viene a cerrar una grieta entre otros dos que ya nos son familiares. El techengue surge de la combinación de dos géneros preexistentes: cachengue, usado en Argentina para referirse a la música para fiestas (reggaetón, cumbia, trap, RKT…) y tech (en su versión de tech house, no techno)
La discusión terminológica de este género que cierrra una grieta trajo otros términos como Latin Tech, Tech House Latino, e incluso Techetón, pero recientemente fue popularizado bajo el nombre de Techengue.
¿Desde cuándo existe el techengue?
Su origen se remonta a 2020, plena pandemia. En Argentina, el género se caracteriza por tomar remixes ya existentes de cachengue, como Fer Palacios, y adaptarlos a la electrónica.
Referentes
Para entender cómo surgió el fenómeno, es crucial hablar de GORDO. Criado en Guatemala, pero nacido en Estados Unidos, GORDO es una figura destacada en el techengue en Argentina -y conocido en España como reggaetech-. Con la viralización del audio de "FENOMENAL" en sus sets, GORDO impactó fuertemente en Argentina. Se destacó por mezclar "La mama de la mamá" de El Alfa. Aunque su carrera comenzó en el hip hop y se mantuvo relevante en la música dance y el EDM durante 14 años bajo el alias de CARNAGE, en 2022 decidió dar un giro y embarcarse en una nueva etapa como GORDO.
Si bien es uno de sus máximos referentes en la actualidad, cabe señalar que el Techengue existía antes de que GORDO se lanzara como proyecto. DJs como DIPLO ya exploraban estas mezclas en sus sets desde hace años. Pero el guatemalteco ha aprovechado el auge de la música latina para impulsar el género.
https://www.youtube.com/watch?v=spjkT0VdGLs
En Argentina, DJs como Nacho Serra y Facundo Majdalani se subieron -y dieron vida- a la tendencia desde 2020. Luciano Troncoso inició sus TECHENGUE SESSIONS en 2021. Otros, como Cande Gariso o Lucas Cash, preparan sets pensados para la previa en YouTube, incluyendo variantes como Ferpa o no-ferpa.
Como todo lo nuevo, el techengue tiene tanto seguidores como detractores. No es simplemente una moda, lleva al menos dos años consolidándose, y hay una demanda del público por consumirlo, no solo en Argentina sino también en lugares como España, Venezuela y Ecuador, donde este género musical también está ganando popularidad. Quizás tener nombre ayude a consolidarlo cada vez más.